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jana

Halo

- El funicular
Halo

A veces nos aferramos a las cosas como si el único sustento en un desierto fuera el libar la saliva de una boca; ese hilo es el que te une a otra vida, con ganas de succionar y hacer vacío para llenarte de todo y quedarte sin nada a la vez. El tirón de una mano, impidiendo que te marches, el guiño de un desconocido, o la conversación durante un largo camino con un taxista, mantienen latente el calor humano que a menudo nos falta.

6 comentarios

kris -

HOLA,BUSCABA MI APODO, Y ME ENCUENTRO CON QUE ALGUIEN VERBALIZA MIS SENTIMIENTOS.ES TUETANAL, MUY VISCERAL LO QUE ESCRIBIS, Y RESUENA EN MI ALMA. DE TODAS FORMAS ANHELO CAMBIAR.UN ABRAZO.KRIS

Steam Man -

Cuanto tiempo sin saber nada de ti.

pricher -

Y que me dices de los mensajes nunca contestados.

Jana -

me gusto mucho lo q escribiste

llegue aca buscando mi nombre

me alegra haber encontrado algo tan bueno


(=


whicho -

extraño los momentos de juventud en los que das largas caminatas porque has quedado con un amigo. esos momentos de soledad previo y posterior al intermedio pasado con una persona a la que quieres son importantisimos. la ida te da esperanzas que animan el alma y la vuelta una felicidad que calienta el corazon. Y si no abrazases esos momentos, en el desierto solo habria soledad.

caronte -

Si no nos aferrasemos a algo, ¿qué nos quedaría? Algo tiene que darnos fuerzas para aseguir adelante, a veces cuesta mucho encontrarlo pero ahí está, esperandonos.

Un beso.