Miel sobre hojuelas

Pues... un día soñé, hace muchos años, con un dinosaurio amarillo, subiendo la Gran Vía, intentando no pisar los coches; muy respetuoso y atemorizado o, más bien, avergonzado por su paso lento y su consecuente colapso. Un día, no sé dónde, me encontré un dinosaurio de goma dura, de color amarillo.
Y ahí lo tengo, entre un Volskwagen escarabajo, un Mini y un Seiscientos, en una estantería, llena de historias que me hacen soñar...
5 comentarios
La Niña de Zion(Quiara) -
reuben -
gasord -
e -
se te echaba de menos por aquí, jana.
caronte -